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miércoles, 27 de febrero de 2013

Cupcakes de chocolate y fresas.. ¡deliciosos!

Lo prometido es deuda y ya está aquí la receta de los Cupcakes de chocolate y fresa.
Cuando hice la mermelada de fresa ya os conté lo que me gustan las fresas. Me encanta su olor y su color rojo brillante.
Estos pequeños frutos rojos (que dan un toque de alegría a nuestras neveras y nos recuerdan que la primavera está próxima) son además una rica fuente de vitamina C con muy pocas calorías, ¿verdad que son maravillosas?


Por todo esto, y aprovechando que estamos en plena temporada, tenía que incorporarlas a mis recetas y ¿qué mejor forma que con unos deliciosos cupcakes de chocolate y fresa? quizá esté feo que yo lo diga pero creo que el resultado sea el que más me ha gustado de todas las recetas que he hecho hasta ahora.


Para ello eché mano de un tarro de mermelada de fresa casera y la añadí en la crema de cobertura y también en el relleno. Su sabor un pelín ácido encaja a la perfección con el chocolate, una combinación que yo antes negaba y que ahora me vuelve loca (recuerdo lo poco que me apetecía cuando oía a mi primo pedir un helado de fresa y chocolate hace algunos años).

Las protagonistas reales de esta receta eran las fresas y tenían que serlo hasta el final. Por este motivo, para la decoración opté por unas fresas partidas por la mitad y bañadas en chocolate negro.. ¡deliciosas!


Para el bizcocho utilicé la receta para tarta de chocolate del libro Cupcakes from the Primrose Bakery y para la crema de fresa adapté la de buttercream de vainilla del mismo libro sustituyendo la vainilla por mermelada de fresa casera, podéis ver la receta aquí.

Cupcakes de chocolate y fresa, para unos 16 cupcakes
(basada en el libro Cupcakes from the Primrose Bakery)
  • 115 g chocolate negro (70% mínimo de cacao)
  • 85 g mantequilla sin sal a temperatura ambiente
  • 175 g azúcar moreno
  • 2 huevos
  • 185 g harina
  • 3/4 cucharadita de levadura (tipo Royal)
  • 3/4 cucharadita de bicarbonato
  • 1 pizca de sal
  • 250 ml leche semidesnatada a temperatura ambiente
  • 1 cucharadita de extracto de vainilla
Para la crema de fresa
  • 110 g mantequilla sin sal a temperatura ambiente
  • 60 ml leche semidesnatada a temperatura ambiente
  • 2 cucharadas de mermelada de fresa 
  • 500 g azúcar glas, tamizada
Precalentamos el horno a 180 ºC (160 ºC si es con aire)
Troceamos el chocolate y lo derretimos en el microondas o al baño maría, con cuidado no se nos vaya a quemar, y lo dejamos enfriar. Batimos la mantequilla con el azúcar hasta que se consiga una textura cremosa. Aparte batimos las yemas (que habremos separado de las claras previamente) y las añadimos lentamente a la mezcla de mantequilla y azúcar. Cuando esté bien incorporado añadimos el chocolate. Tamizamos el harina con la levadura, el bicarbonato y la sal. Ponemos la leche en una jarra y le añadimos el extracto de vainilla. Añadimos un tercio de la mezcla de harina a la mezcla del chocolate y batimos hasta que se incorpore totalmente, entonces añadimos un tercio de la leche y seguimos batiendo hasta que quede perfectamente incorporado. Volvemos a repetir estos pasos hasta que hayamos incorporado todo el harina y toda la leche. En un bol aparte, montamos las claras a punto de nieve. Cuando estén listas, las añadimos cuidadosamente y con una cuchara metálica a la mezcla. Las mezclaremos con cuidado, con la cuchara metálica y sin batir para que no pierda aire.
Repartimos la mezcla final en los papelitos para magdalenas llenándolos 2/3 y  horneamos unos 20-25 minutos o hasta que el palillo salga limpio. Los dejaremos enfriar unos 5 minutos en el molde y luego los pasaremos a una rejilla para que terminen de enfriarse evitando condensaciones.

Para la crema de fresa. En el bol de la batidora se añade el azúcar glas junto con la mantequilla y la leche. Empezamos batiendo a velocidad baja y cuando esté ya todo mezclado añadimos poco a poco (a cucharaditas pequeñas) la mermelada de fresa y seguimos batiendo a velocidad baja hasta que se incorpore. Tras esto aumentamos la velocidad y batimos a velocidad máxima unos 3 minutos hasta que la crema quede esponjosa. 
Para esta crema no utilicé colorante y por eso me ha quedado este color pálido, que a mi me gusta, pero si lo preferís más fuerte podéis añadir unas gotitas de colorante en gel rosa.

Para rellenarlas con la mermelada de fresa basta con hacer un agujerillo con un descorazonador de manzanas o, en su defecto, con una boquilla del revés.

Y finalmente pondremos las fresas bañadas de chocolate. Para bañarlas, derretimos un poco de chocolate, las mojamos y las dejamos enfriar unos 15 minutos en la nevera.


¡Espero que os guste!


Por último, agradecer a María Marín sus fotos, las fotos de esta entrada las hizo ella (la soborné con un café y un cupcake, jjjj) y ¿a que son geniales? cuánto me queda por aprender!! jeje. Desde aquí la animo a que no deje nunca de hacer fotos, si queréis ver más fotos suyas podéis visitar su Flickr.

Feliz y dulce semana, besicos!

P.D: estoy enlazando esta receta a la fiesta de enlaces del blog Personalización de blogs.

lunes, 18 de febrero de 2013

Tarta de chocolate y galletas. Tarta de cumpleaños.

Ayer tuvimos celebración cumpleañera por partida doble. Desde hace ya varios años las Ms del grupo nos juntamos para celebrar nuestros cumples, ella es dos días mayor que yo pero parecemos de la misma edad, ¿verdad? jjjj Invitamos a nuestros amigos a una comida casera, ella preparó dos cocas riquísimas para el aperitivo (me tienes que pasar la receta de la masa!!) y yo hice un arroz y costra como plato principal y también preparé el postre.


Ya tenía decida la tarta que haría desde hacía tiempo: ¡¡Tarta de chocolate y galletas!! la tradional y la que siempre ha estado presente en todos los cumples hasta que nos ha dado por innovar. 
Hay infinidad de recetas diferentes para hacer esta tarta, tantas casi como gustos: con chocolate a la taza, con chocolate en polvo, con natillas.. y seguro que a todos nos parece que la mejor es la que hacía o hace nuestra madre, por eso desde el principio sabía la que iba a hacer, la que me hacía mi madre, la mejor de todas las que he probado!!

Y para encontrar esta receta no tuve que recurrir a mis libros de repostería ni navegar por la red, la tenía en casa, en el cajón del armario del salón, en la carpeta de recetas donde mi madre guarda las recetas que ha copiado de la carpeta de recetas de su madre, mi abuela, y a la que pienso recurrir en más ocasiones sin duda alguna.


Varias cosas me sorprendieron al releer esta receta, la había hecho hacía tiempo y recuerdo ayudar a mi madre remojando las galletas pero no recordaba muy bien como era. La primera fue descubrir que la crema de chocolate es básicamente lo que ahora llamo buttercream y creemos que importamos de los anglosajones, pues bien, mi abuela, mi madre, mis tías,.. ya la hacían hace tiempo y sin saberlo. Sustituí la mantequilla por margarina (como siempre habíamos hecho en casa) y así la hice apta para intolerantes a la lactosa. La segunda fue al leer una tableta de chocolate que había que rallar pero, según recordaba, mi madre siempre lo había echado en polvo. También que llevaba coco en la crema, mi madre nunca lo puso, a mi el coco no me gustaba nada antes.

Decidí seguir la receta al pie de la letra. Así tuve una crema extracremosa con algunos trocitos de chocolate, al ir rallado no termina de fundirse con la mantequilla, de un sabor delicioso y nada empachoso. Tuve mis dudas porque quedaba un color claro, no era el del chocolate oscuro que estamos acostumbrados a ver y estuve apunto de añadirle un poco de chocolate en polvo pero finalmente no lo hice y me alegro, el resultado me encantó y, por los comentarios, creo que a los invitados también.


Quería decorarla de una manera muy sencilla para que la tarta fuera la protagonista total. Opté por hacer una guirnalda de banderines que le diera un pequeño toque de color y como no tenía mucho tiempo esta vez sí recurrí a la red, si os gustan las letras las podéis descargar aquí
¿Y qué me decís de las servilletas? fueron parte del regalo de cumpleaños (gracias Elena! mi hermana, pinche y catadora oficial), me encantan por su colorido y originalidad, el elefante malabarista cargado con la tarta, los regalos y los globos.. ¿verdad que es preciosa?

Bueno, ya no me enrollo más, voy con la receta.


Tarta de chocolate y galletas (para unas 12 personas)
  • 300 g margarina a temperatura ambiente (se puede sustituir por mantequilla sin sal)
  • 1 tableta chocolate (yo usé de Nestlé Postres)
  • 1 vaso coñac (yo no tenía y usé moscatel, quedó genial)
  • 75 g coco rallado
  • 500g azúcar
  • 2 huevos
  • 4 cucharaditas de café soluble
  • 500 g galletas
Se bate la margarina con 300 g del azúcar molido (yo no tengo donde molerlo así que usé azúcar glas) durante 1/2 hora aproximadamente, el azúcar se mezclará por completo con la margarina y quedará un mezcla muy cremosa, fina y suave. Añadimos el chocolate rallado, el coco, los 2 huevos*, 2 cucharadas de moscatel y batimos hasta que quede todo perfectamente incorporado y reservamos.

Ponemos en una cazuela el resto del azúcar con las 4 cucharaditas de café y vaso y medio de agua y lo llevamos a ebullición. Cuando hierva se retira del fuego y se añade el moscatel restante.

Ahora empezamos a montar la tarta. Vamos bañando las galletas en el almíbar, pero sin pasarnos de tiempo ya que si no se desharán y se creará una pasta extraña pero que tampoco nos queden excesivamente secas, y formamos la primera capa de galletas. La cubrimos con una capa de crema de chocolate. Volvemos a poner otra capa de galletas bañadas en el almíbar y luego otra de chocolate y vamos poniendo capas mientras nos queden ingredientes, a mi me dio para cinco capas de galleta. Cuidado! hay que reservar crema de chocolate suficiente para cubrir la tarta por completo al final y ya la decoramos como nos guste.

¡Espero que os guste!

Feliz y dulce semana,  ¡¡besicos!!


* Los huevos supuestamente van crudos pero por precaución pongo agua a hervir y cuando ya está hirviendo los sumerjo unos 10 segundos, así mato a los bichitos malignos y me quedo más tranquila. Los dejamos enfriar antes de añadirlos a la crema.

martes, 12 de febrero de 2013

Mermelada de fresa con un toque de vainilla.

Me encantan las frutas, bueno, no todas, pero las que me gustan me gustan mucho.
Ir a la frutería y dejarte conquistar por sus olores y colores me parece un gran placer cotidiano, aunque muchas veces me lo pierda por ir con prisas y no me de ni cuenta. Pero las otras veces, cuando estoy allí y me paro y me acuerdo y lo pienso creo que una sonrisa se dibuja en mi cara. En fin, la belleza de las pequeñas cosas. Otra virtud que tienen las frutas, al menos a mi parecer, es su temporalidad, saben hacerse desear apareciendo solo en una determinada época del año. Ahora las fresas están empezando a hacer acto de presencia y son tan bonitas y huelen tan bien que me las llevaría todas.


Nunca me han gustado las mermeladas, los sabores excesivamente dulces nunca me han atraído demasiado, me resultan empalagosos, y es ahora cuando estoy empezando a descubrirlas y apreciarlas. Me gusta combinarlas con otros sabores y han supuesto para mi un mundo nuevo de posibilidades con patés, quesos, carnes o incluso en el aliño de una ensalada creo que hacen una combinación perfecta y con los dulces.. ¡como no!


El otro día iba a comprar una mermelada de fresa para unas cupcakes que iba a hacer (pronto pondré la receta) y pensé ¿por qué no la hago yo? busqué recetas en mis blogs de cabecera y finalmente tomé como referencia esta de 'Joy the Baker' para rehacerla a mi manera y el resultado me ha encantado, está riquisima y de un rojo que parece que te dice "cómeme".

Mermelada de fresa con un toque de vainilla
  • 500 g fresas
  • 250 g azúcar
  • 1 vaina de vainilla
  • el zumo de 1 limón
Lavamos bien las fresas y las troceamos. Las ponemos a macerar con la mitad del azúcar (125g) y la vaina de vainilla, la abrimos y rascamos un poco en el interior para que salgan las semillas, así dará más sabor a nuestra mermelada, las tendremos durante 24 aproximadamente.
Una vez maceradas las pasamos a un cazo y añadimos el zumo de limón y el resto de azúcar (125g). La llevaremos a ebullición y bajamos el fuego al mínimo, la tendremos unos 20 minutos hirviendo. A continuación, la apartamos del fuego hasta que deje de burbujear y repetimos el proceso: la llevamos a ebullición y que hierva 20 minutos más. Tras esto la trituramos, cuanto va en gustos, yo intenté no hacerlo mucho para que quedara algún trocito de fruta. La volvemos a poner al fuego y ya la tenemos hasta que alcance la consistencia deseada. Para ver si ya a espesado podemos coger un poco con una cucharilla y meterla unos minutos al frigorífico, así sabremos como será su consistencia final y aviso que esta mermelada no queda muy espesa es entre un sirope y una mermelada.
Ya tenemos nuestra mermelada lista para poner en nuestro tarro preferido, como no hice mucha cantidad no la envasé al vacío.
durante la maceración..
¡Espero que os guste!

Por último, agradecer a María Marín sus fotos, las fotos de esta entrada las hizo ella y ¡me encantan! desde aquí la animo a que no deje nunca de hacer fotos, si queréis ver más fotos suyas podéis visitar su Flickr.

Feliz y dulce semana, besicos!

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